EL ARROZ
El cultivo del arroz comenzó hace casi 10.000 años, en muchas regiones húmedas de Asia tropical y subtropical. Posiblemente sea la India el país donde se cultivó por primera vez el arroz debido a que en ella abundaban los arroces silvestres, pero el desarrollo del cultivo tuvo lugar en China, desde sus tierras bajas a sus tierras altas. Probablemente hubo varias rutas por las cuales se introdujeron los arroces de Asia a otras partes del mundo. En América el arroz fue introducido por Cristóbal Colón.
Como todo cereal, el arroz es rico en almidón y calorías, aunque pobre en proteínas. Nunca debe considerarse como un alimento completo. Es muy útil en dietas tanto para enfermos como para adelgazar, dado que es de muy fácil digestión.
Cerca de 3.000 millones de personas comparten el arroz como alimento fundamental en la dieta: forma parte de la cultura, las tradiciones, costumbres y economía de muchos pueblos del mundo. Desde Extremo Oriente hasta África, de Oriente Medio a Japón, numerosos países disfrutan de este cereal, que también constituye todo un símbolo en España por ser el ingrediente fundamental de la paella, el plato español más universal. El arroz significa riqueza y prosperidad. Tanto es así, que supone una tradición imprescindible en las ceremonias matrimoniales.
El arroz ha supuesto durante siglos el alimento básico de muchos países. Un fenómeno que tiene su explicación en las excelentes propiedades nutritivas de este cereal.
Aunque la cantidad de proteína que tiene el arroz no es elevada, es mucho mayor que la de otros cereales. Además, es apto para muchas personas con ciertos problemas dietéticos: no tiene colesterol ni gluten, y tienen bajo contenido de sodio, lo que le hace un excelente compañero de ciertas dietas médicas.
En China el arroz es tan importante que la palabra quiere decir comida y cada chino consume 500 gramos de arroz diariamente. A Japón se le denomina “el país del arroz”. De este cereal se obtiene el famoso Sake o licor de arroz, que en China se le llama “siew jing jao”, también se hacen harinas, pastas, dulces, vinagres y un sin fin de productos alimenticios.
Además, el arroz es rico en minerales, como fósforo, hierro y potasio, y vitaminas, además de disponer de los ocho aminoácidos esenciales para el cuerpo humano. El arroz contiene naturalmente cantidades importantes de tiamina, riboflavina y niacina.
Este cereal destaca, sobre todo, por ser muy versátil en la cocina. Existen miles de formas de preparar un buen arroz, ya sea en guisos, en ensalada, como guarnición de carnes y pescados, como plato único, en paella y otros tipos de especialidades arroceras, y también como postre. Si se os pega el arroz, ponéis una corteza de pan y tapadlo durante 5 minutos. Se come el sabor a quemado, y no sabe a nada. Para que la sal de los saleros no se humedezca o apelotone, basta con le eches dentro unos granitos de arroz.
Tomado de Recetas.Net